La continuación de las políticas de intervención de Estados Unidos en nuestro continente es evidente: desde la injerencia política, militar, diplomática, pasando por el financiamiento de golpes de estado, el impulso de mecanismos de lawfare, el desarrollo de políticas de “asistencia para el desarrollo” y presencia de ONG’s entre muchos otros mecanismos que lo único que buscan es perpetuar la presencia estadounidense en América Latina y el Caribe con el claro objetivo de garantizar control geopolítico de nuestra región para asegurarse el libre acceso a nuestros bienes comunes y nuestras riquezas.

En ese marco, esta semana se presentaron dos graves hechos de violación a la soberanía en la región que nos ponen en alerta sobre la puesta en marcha de aquel Plan Cóndor 2.0 que hemos denunciado en diversas oportunidades:

A la madrugada del viernes 05, el gobierno de Javier Milei en Argentina anunció en cadena nacional ―con el himno de los Estados Unidos como apertura, y la bandera estadounidense flameando junto a la Argentina― la creación de una base naval conjunta en el Atlántico Sur perteneciente al territorio nacional, acompañado junto a la Jefa del Comando Sur de EE.UU, Laura Richardson, quien llegó el país después de la visita de William Burns, director de la CIA, en la misma semana en que se conmemoraba el Día del Veterano y de los caídos en la Guerra de Malvinas.

Por otra parte, a la madrugada del sábado 06, efectivos de las Fuerzas Militares de Ecuador bajo órdenes del presidente Daniel Noboa, irrumpieron en la Embajada de México y detuvieron al ex vicepresidente Jorge Glas, donde se encontraba asilado. Glas, quien se encontraba detenido y perseguido por razones políticas desde el gobierno de Lenin Moreno por su lealtad al proyecto de la Revolución Ciudadana.

Esta irrupción constituye una irrupción en territorio mexicano, y con ello una violación a la Convención de Viena que marca un grave precedente que se presenta a sólo meses de la visita de Richardson al país en el pasado mes de Enero donde se impulsaron, contra la voluntad popular, agendas de seguridad conjuntas entre el Comando Sur y el gobierno de Noboa.

Convocamos las organizaciones populares, de izquierda y democráticas a manifestar su solidaridad con el pueblo y el gobierno mexicano que ha sufrido la violación de su soberanía, así como también con Jorge Glas, denunciando firmemente este sistema de persecución política y física impulsado desde los Estados Unidos.

De la misma forma, denunciamos nuevamente la puesta en marcha de este Plan Cóndor 2.0 impulsado por el imperialismo estadounidense, sus aliados europeos y sus cipayos locales contra Nuestra América. Aunque continúen intentando su injerencia en nuestra región para violar sistemáticamente el Derecho Internacional y los Derechos Humanos, aquí estaremos los pueblos dispuestos a defender nuestra soberanía e independencia, siguiendo los pasos de nuestros padres y madres libertadoras.

¡Nunca más Plan Cóndor en Nuestra América!

¡Soberanía e Independencia en toda nuestra Patria Grande!

¡Váyanse al carajo, yankees de mierda!

 

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